Katia de Llano*
El gobierno cubano ha ido tomando en cada momento, distintas medidas para detectar y combatir el virus, en dependencia de la situación que se ha ido presentando.
La primera medida fue tomar la temperatura mediante scaners en los aeropuertos a todos los que llegaban al país. Desde la aparición de los tres primeros casos, el 11 de turistas italianos y teniendo en cuenta que los que entraran al país podían tener el virus, si presentar síntomas, se adoptó la medida de mantener a las personas que arribaban al país en aislamiento obligatorio durante 14 días, que es el período de incubación del virus,. Estas personas están ingresadas en lugares habilitados especialmente para ese propósito y para ello se utilizan hoteles y otras instalaciones de distintos organismos del estado.
Cada persona que haya arribado a Cuba y presente fiebre o gripe, cubano o extranjero, se ingresa en centros hospitalarios, para lo cual se crearon capacidades en esos centros, trasladándose los pacientes que en ellos estaban ingresados para otros centros, así como las operaciones quirúrgicas y consultas médicas. Estas personas son consideradas sospechosas y se determina quienes tuvieron contactos con ellos, y también se ingresan aunque no presenten síntomas.
Es por ello que hay un número de personas ingresadas, mucho mayor que los que califican como sospechosos.
Posteriormente, se suspendió la llegada al país de extranjeros por puertos y aeropuertos y aunque inicialmente se permitió la salida de extranjeros y cubanos, recientemente se cerraron los puertos y aeropuertos. Solo se autorizan entradas o salidas de manera excepcional.
Los turistas que decidieron permanecer en Cuba o que no han podido evacuarse para su país de origen y estaban alojados en casas de rentas, fueron trasladados a hoteles, en los que hay un equipo de médicos y enfermeras, que los chequean diariamente, y en los que el precio de alojamiento es similar al de las casas donde estaban. Algunos extranjeros residentes en Cuba, por ser estudiantes u otras razones, permanecen aquí en casas de renta. A todos, alojados en hoteles o casas de reta, se les ha prohibido salir del lugar de alojamiento.
Adicionalmente, los estudiantes de medicina visitan diariamente todas las viviendas para indagar si hay personas con fiebre, gripe y malestar general, y las personas que respondan afirmativamente a esa encuesta son examinadas por el médico de familia de su comunidad y se les orienta permanecer en sus casas y se mantienen en vigilancia.
Esos estudiantes no tienen contacto directo con la persona de la casa que entrevistan, ni entran en ella, solo hablan a una distancia de más de un metro y usan nasobucos o mascarillas para protegerse, por lo cual el riesgo de contagio no existe.
A finales de marzo, en Cuba se recibieron 100 mil test rápidos que fueron distribuidos por todo el país y que se le han comenzado a aplicar a todas las personas ingresadas, sospechosos o no. Si esos test dan positivos, se les hace al paciente un test de biología molecular, llamado PCR, que es más preciso y que confirma el diagnóstico.
Actualmente circulan en Cuba 17 virus de gripe que son benignos, principalmente el de influenza A, por lo que a los que presentan síntomas de gripe, se les hace un test para determinar si sus síntomas corresponde a alguno de ellos.
Si se comprueba que una persona tiene el Codiv-19 se inicia el tratamiento, similar al que se ha indicado en otros países en que ha habido un gran número de enfermos, especialmente en China, y aconsejado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En ese tratamiento se incluye además, el Interferón Alfa 2 recombinante, que se ha usado en Cuba para enfermedades virales con éxito y que es un antiviral producido en el Centro de Biología Molecular de Cuba, que ha tenido buenos resultados en China para el tratamiento de esa enfermedad y que, aunque no constituye una cura del covid19, ayuda al organismo del enfermo a luchar contra él, sin apenas efectos secundarios. Ese producto también se produce en China en una empresa mixta con Cuba.
Los gastos en que incurre por el aislamiento durante los 14 días de cuarentena, así como por los test, el ingreso hospitalario y el tratamiento de esta pandemia son gratuitos no solo para cubanos, sino también para los extranjeros.
Posteriormente se decidió suspender todas las clases desde la enseñanza primaria hasta la universitaria y se están impartiendo clases para la enseñanza primaria y secundaria diariamente por la televisión nacional.
No obstante, hay todavía, en este momento en Cuba más de 18 mil residentes en el extranjero, de ellos más de 7 mil cubanos emigrados. Entre los extranjeros hay 1 680 alojados en casas particulares. La oficina de inmigración está visitando las casas de rentas a extranjeros, para conocer en qué situación están.
Se han tomado muchas medidas para garantizar la seguridad de los trabajadores. Se orientó que los centros de trabajo debían enviar a sus casas a todos aquellos que fueran mayores de 60 años o padecieran de enfermedades crónicas que pueden complicarse. En Cuba el 23,7% de la población padece de asma, el 10% de diabetes y el 30,9 de hipertensión. Alrededor del 23% de la población es mayor de 60 años.
Las actividades de servicios se han cerrado, aunque aún permanecen funcionando los bancos, pero se ha pospuesto el pago de los servicios y los impuestos, para disminuir el número de personas que asisten a ellos, y puesto en práctica mecanismos para acceder a esos servicios electrónicamente.
Se suspendieron todas las actividades culturales, como conciertos y obras de teatro y ballet. Los cantantes están ofreciendo conciertos desde su casa, que se transmiten por internet. Se cerraron igualmente los clubs y cabaret. Se suspendieron igualmente los eventos deportivos, se cerraron las piscinas, incluyendo las de los hoteles. También las reuniones de las distintas organizaciones.
Se suspendió igualmente la transportación de pasajeros entre las provincias, tanto mediante los autobuses, los trenes y los vehículos particulares.
Se ha determinado que los que no puedan seguir trabajando por cerrar su centro, reciban una garantía salarial y se traten de reubicar en otras actividades que permanecen funcionando.
Los restaurantes que servían comida a los ancianos que viven solos a bajo precio, ahora lo llevan a sus casas, para evitar que salgan a la calle. Muchos restaurantes y paladares han cerrado y solo sirve comida para llevar. A los que permanecen abiertos, se les orientó dejar un espacio de un metro entre las mesas. Las tiendas tienen la obligación de suministrar a los clientes un líquido antiséptico para lavarse las manos antes de entrar a comprar y en caso de que hagan cola o fila, mantener una distancia de un metro entre una persona y otro.
Se ha orientado a toda la población que permanezcan en sus casas y se estableció el uso obligatorio de nasobucos o mascarillas para los que tengan que salir a hacer alguna gestión.
No obstante, aún se observan demasiadas personas en la calle. Los carros altoparlantes de la policía recorren las calles advirtiendo sobre la necesidad de permanecer en las casas y del uso del nasobuco y se han multado o arrestado a personas que no cumplen con las medidas adoptadas.
Se ha establecido cuarentena obligatoria para dos zonas de más de mil habitantes cada una, una en Pinar del Río y otra en el Vedado (La Habana), donde se ha presentado lo que se denomina contagio comunitario, que no proviene directamente de una persona que llegó del extranjero, sino de otros cubanos residentes aquí, que a su vez se contagiaron con alguien que provenía de otro país.
Diariamente, en horas de la mañana, el jefe de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública realiza una conferencia de prensa que es transmitida por la televisión y la radio, en la que se informa de la situación al finalizar el día anterior. En el programa La Mesa Redonda, que se transmite diariamente en horas de la tarde por la televisión y la radio, comparecen frecuentemente los ministros de Salud Pública, Transporte, Comunicaciones, Trabajo y Finanzas, para explicar las medidas y responder a las dudas o quejas que plantea la población a través de correos electrónicos o por las redes sociales. El Consejo de Ministros se reúne diariamente para evaluar la situación. Se activaron los consejos de defensa Nacional, que funcionan en tiempos de fenómenos naturales como huracanes, para tomar las medidas que corresponda a cada localidad y evaluar a situación.
Se hace énfasis en lo que se denomina el aislamiento social, que consiste en no salir de la casa y no recibir visitas de amigos ni familiares, mantener distancia con otras personas y no saludar dando las manos. Además se enfatiza en el lavado de las manos con productos desinfectantes.
Se han enviado misiones de médicos y enfermeros a 14 países que lo han solicitado. Internamente, muchas personas confeccionan en sus casas nasobucos para repartir a sus vecinos y amigos y ayudan a las personas de mayor edad a comprar sus alimentos para que no tengan que salir a las calles. Distintas instituciones también confeccionan nasobucos para los trabajadores que tienen que permanecer en sus trabajos y población en general.
En el día de ayer, 3 de abril, había 288 casos positivos del Covid-19; 3 343 ingresados y de ellos, 602 sospechosos y se han hecho 5 22 test de la enfermedad. Han fallecido por esa causa 6 personas y se le ha dado alta médica a 15.
La Habana, 04 de abril de 2020
* Profesora jubilada de la Facultad de Economía de la Universidad de La Habana; especialista en Finanzas y Economía de Empresa
El presente artículo fue publicado por el diario ¡Por esto!